omega 3 para adultos mayores

Parte I: Alzheimer:
Investigadores que trabajaban buscando curas para las enfermedades denominadas "enfermedades debilitantes" (enfermedades que se desarrollan con la edad), suponían o tenían ciertos indicios que estas podían ser combatidas con el consumo de aceite de pescado u otros alimentos que aportan Omega 3. Ahora esto ha sido confirmado. El investigador Greg Cole, profesor de medicina y neurología del David Geffen School of Medicine de la UCLA y director asociado del UCLAs Alzheimer Disease Research Center y algunos de sus colegas confirmaron que la molécula DHA (Omega 3 de 22 átomos de carbono, presente en el aceite de pescados de aguas frías) incrementa la LR11, una proteína que es deficiente en pacientes con Alzheimer, y la cual se asocia a la destrucción de proteínas que forman las placas en el cerebro en pacientes diagnosticados con este mal.
Estas placas son depósitos de la llamada proteína beta-amiloide, de la cual se piensa, que es tóxica para las neuronas que forman el cerebro, con lo que se desarrolla el Alzheimer, que es una enfermedad debilitante neurodegenerativa que causa pérdida de memoria, demencia, cambios en la personalidad e incluso indirectamente, la muerte.
Algunas estadísticas de la Asociación Nacional del Alzheimer (en EE.UU), estiman que en ese país actualmente hay alrededor de 5,1 millones de personas que presentan esta enfermedad y para 2050 podrían estar en un rango de 11 a 16 millones. En tanto en Europa hay mediciones que indican que la demencia senil tiene una prevalencia estimada de 1 a 5% en mayores de 65 años, cifra que se va duplicando cada cuatro años hasta alcanzar una tasa de 30% a los 80 años. En Chile la situación es muy similar; según la Revista Médica de Chile más de 100.000 personas presentan actualmente algún estado de demencia y también se menciona que el Alzheimer representa una de las 10 primeras causas de muerte en el grupo etario señalado.

Al hacer el estudio preliminar en ratas, los investigadores encontraron que incluso niveles bajos de DHA en la dieta subieron de forma importante la producción de la proteína LR11, responsable por prevenir los signos de la enfermedad. Estudios posteriores demostraron que esto también se da en el caso de los cerebros humanos, por lo que concluyen que el Omega 3 puede prevenir de forma importante este mal.
Aún hay bastante investigación en curso, para afinar dosis y otros factores, pero ya se sabe que el aporte diario en adultos mayores de Omega 3 puede contribuir a una vejez más digna y sin los problemas asociados a esta enfermedad.

Fuente:
• ScienceDaily (Jan. 2, 2008)
• Rev. méd. Chile v.133 n.2 Santiago feb. 2005